En noviembre, más de 50 mil motoristas salían a la calle para que ‘se cumpliera la ley’ y, además, se archivaran los expedientes disciplinarios abiertos contra el agente de la Guardia Civil, Juan Carlos Toribio, y se le permitiese realizar actividades no lucrativas en su tiempo libre en pro de la seguridad vial de los ciudadanos de tal forma que fuese compatible con su labor como agente de Tráfico. Sin embargo, la iniciativa no ha tenido el efecto esperado. Y es que el agente había sido sancionado con dos meses de suspensión de empleo y sueldo. Sin embargo, su aplicación ha sido más que dudosa.
De esta forma, desde la asociación Mutua Motera denuncian ‘una campaña de persecución’ contra Toribio. Y es que el agente ha visto cómo era suspendido de empleo desde el 30 de agosto al 29 de octubre de 2010, mientras que la retirada de sueldo se le ha hecho efectiva en Navidad y enero. ‘En esta ocasión la estrategia parece haber sido la de castigar a toda la familia en el momento más entrañable y difícil del año, en Navidad y en la cuesta de enero’, denuncian desde la asociación motera.
En la concentración de noviembre ya anunciaban medidas de apoyo. Una advertencia que se ha efectiva con la puesta en marcha de una campaña en la que se pide a los miembros de la asociación y al colectivo su participación. En este sentido, indican que apoyarán económicamente a la familia del agente. ‘Ni esta Navidad, ni en enero, ni nunca, mientras nuestros medios lo permitan, van a pasar penalidades’, destacan.
Por otro lado, instan al envío masivo de cartas de protesta en cualquier cuartel de la Guardia Civil de España. Para ello proponen dos tipos de documentos, uno de felicitación por la labor que está desempeñando Juan Carlos y otra de queja a sus mandos por la persecución a la que está siendo sometido. De esta forma, invitan a que los escritos sean presentados el próximo 12 de febrero para ‘hacer una presión más eficaz’.
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